La vivienda nueva ofrece ventajas como valorización a lo largo del tiempo. La vivienda usada suele tener precios más bajos, pero limita las opciones de personalización
La vivienda nueva ofrece varias ventajas a tener en cuenta al momento de comprar una propiedad. Al adquirir una vivienda sobre planos, se tiene la oportunidad de obtener valorización a lo largo del tiempo, tanto del sector en el que se encuentra ubicado como del proyecto en sí. Además, al elegir una vivienda nueva, se tiene la posibilidad de seleccionar el apartamento que mejor se ajuste a las preferencias personales, como la distribución de los pisos, la orientación (interior o exterior) y la ubicación dentro de la torre.
Otro beneficio de la vivienda nueva es que generalmente se ofrece un mayor plazo en el pago de la cuota inicial, lo cual brinda una mayor flexibilidad financiera para los compradores. Además, al tratarse de una construcción nueva, la constructora es responsable de responder por cualquier no conformidad o defecto que pudiera presentarse en el apartamento, lo que brinda un respaldo adicional al comprador.
Por otro lado, la vivienda usada puede ser una opción a considerar debido a su precio más bajo en comparación con una vivienda nueva. Sin embargo, se debe tener en cuenta que se deberá adaptar a lo que ya está construido, lo que puede limitar las opciones de personalización y requerir costos adicionales en caso de querer realizar remodelaciones o cambios en el interior de la vivienda. Además, el tiempo para el pago de la vivienda usada suele ser más reducido y no se puede acceder a subsidios de vivienda ni a beneficios gubernamentales destinados a la adquisición de viviendas nuevas.
Aunque la vivienda usada puede ser una alternativa válida en algunos casos, es importante destacar que adquirir una vivienda nueva ofrece numerosas ventajas. La posibilidad de obtener valorización a largo plazo, la capacidad de elegir el apartamento según las preferencias individuales, los plazos más flexibles para el pago de la cuota inicial y la tranquilidad de contar con la responsabilidad de la constructora ante posibles no conformidades son aspectos que respaldan la decisión de comprar vivienda nueva. En última instancia, la elección entre vivienda nueva y usada dependerá de las necesidades y preferencias individuales de cada comprador.